En Indonesia, como diria el Sr. Carlos Garcia, vivi “el suenio de un sol y de un mar, y una vida peligrosa…”. Este pais desde el momento en que aterrice con mi vuelo Bangkok-Bali, me empezo a llenar de gratitud.
A todo esto Agus se quedo en Tailandia y después se vino para la India .Lo primero que hice antes de encontrar alojamiento fue alquilar una tabla de surf por todo el mes, después fui a buscar a mi amiga Clara, que como les dije en el ultimo mail, estaba con cinco amigas suecas con las cuales me movi de aca para alla por todo Kuta, el pueblo turístico por excelencia en Bali.
Una vez que le agarre la mano al surf otra vez después de cuatro meses parado, con Clara nos fuimos para Gili Islands, tres islitas paradisiacas separadas por un enorme arrecife de coral que las cruzas caminando en veinte minutos. Vida total de relax, desayuno islenio, café local, muy bueno, playita, mucho buceo, a la maniana si había olas un ratito en el agua antes que se asome el coral, simplemente relajarse.
De ahí nos cruzamos para Lombok, otra de las islas del archipieago y alquilamos una moto con un rack para la tabla. Nos cruzamos toda la isla atravesando aldeas, arrozales, playas paradisiacas, increíble.
En sur de Lombok nos quedamos en Kuta Lombok, una aldea rodeada de playas con olas para todos los gustos, y donde surfee mi primer arrecife en Gropuk, rompiente a la cual llegas solo con un bote que alquilas a locales. El lugar paraíso total, y sin romper la costumbre, los locales la mejor onda para todo. La verdad la gente en Indonesia de diez. Antes de que Clara se tome el avión de vuelta para Estocolmo nos hicimos una pasada por Ubud, un pueblo que queda en el medio de la selva y esta rodeado de montanias y volcanes, corazón cultural y religioso de Bali, por supuesto ya habíamos vuelto a Bali desde Lombok, templos increíbles comidos por la selva, mucho mono dando vuelta, casi me voy a las manos con uno, y excelentes cafes.
Ya solo de vuelta en Kuta Bali pasaba entre seis y ocho horas por dia metido en el agua, comer, y a la noche juntarme con amigos a tomar algo o tocar un rato el Djembe. Ta vez parezca una boludez esto, pero desde los diez años que anhelaba aprender a surfear, vivir la sensación de correr una ola parado en una tabla, sentir esa conexión con el mar, puede sonar estúpido, pero para mí fue siempre un suenio que finalmente 17 anios depues concrete, y mierda que valio la pena la espera.
No hay palabras para describir lo que se siente cuando uno monta una de esas paredes de agua en Uluwatu, uno de mis lugares en el mundo, y ve pasar por debajo de la tabla los dientes y colores de los corales, la adrenalina que se siente, la autosatisfacción. Uluwatu es una playa famosa en Indonesia para surfear. Cuando uno va a la maniana con marea alta, entra al mar por el medio de una cueva que te escupe al mar. Debajo de la rompiente, el fondo, es de coral, peligroso, pero vale la pena, y en frente tuyo tenes un tremendo acantilado con templos balineses que completan la magia de este lugar.
Mis días en Bali transcurrieron asi, tratando de cumplir uno de mis objetivos en Indonesia, eso que había empezado en Australia y que había retrasado por 17 anios. Durante la noche, con unos amigos locales que tienen una fabrica de instrumentos de percusión, nos juntábamos a tocar. Es asi que una noche
me invitaron a tocar en vivo con ellos el Djembe, un tambor africano, en el boliche mas popular de Kuta.
No solo eso, sino que también no me pude aguantar la tentación de llevarme uno para casa. Octa y Elvi, me llevaron a su fabrica y me dijieron que me arme el Djembe a mi medida, y no solo eso sino que también prácticamente no me cobraron nada. Estos dos pibes se criaron en la calle, lo único que sabían hacer era música, y si bien ahora les va bien, el pibe de la calle nunca lo dejaron atrás. Creo que conoci poca gente tan generosa como ellos. En definitiva mi Djembe esta camino a casa en barco.
Despues de la despedida de Bali, me cruce para Java, la principal isla junto con Sumatra. Ahí fui a Boronbudur y Palangban, dos templos hindúes y budistas increibles, mezclados entre la selva y rodeados de volcanes que todavía humean. Ahí conoci a un grupo de chicos que estaban en el secundario y estaban rindiendo su examen final de ingles, que era yo, sisi, trate de explicarles que mi lengua native era el castellano, pero me dijieron que no importaba. La cosa es que me sentí como una estrella de rock “foto, facebook, autógrafo….”, aca los occidentales somos asi, bichos raros, casi como marcianos, y cuando ven uno es el furor. La verdad que todo el curso una masa, todavía me hablo en facebook con algunos de ellos.
Indonesia sin duda fue uno de mis favoritos del viaje, no solo el lugar y el haber cumplido mas suenios lo hicieron especial, sino la gente de la que me rodee, los locales y los no locales, tiene una atmosfera especial, tiene esa cosa de que a pesar de ser un país sobrepoblado (260M de personas, el país con mas musulmanes del mundo) tienen una paz que no la encontras en otros lugares. Que se yo, será el paraíso en el que viven, no lo se, pero si en el mundo hay lugares mágicos, Indonesia sin duda es uno de ellos. No me arrepiento de haber hecho tantas promesas de regresar, y que se le va a hacer, un hombre cumple con sus promesas, tendre que cumplir vio.
Indonesia es el lugar perfecto para desmitificar esa estúpida asociación de Islam con fundamentalismo religioso que muchas veces muy tristemente e irresponsablemente medios y “académicos” occidentales manifiestan públicamente. Indonesia es el país con mayor población musulmana del mundo, mas de 250 millones de personas, y hasta el momento uno de los países con mentalidad mas abierta de los que estuve.
Las mujeres que usan velo lo usan porque es parte de su cultura, de su tradición, no por imposicion. No toda la pilcha tiene que pasar por las pasarelas de Milan o Paris para ser top, y hay velos que realmente realzan la belleza de las mujeres. La gente tiene la cabeza muy abierta. Muchos musulmanes que conoci tratan de seguir el Koran mas como modo de vida que como la aplicación de una doctrina religiosa a la vida terrenal, no como algo espiritual, sino mas bien como una forma de vivir sanamente.
Hace unas semanas le dije a Clara mientras tirábamos una moneda en una fuente de los deseos, que en realidad estaba tirando la plata, porque no necesitaba absolutamente nada mas para mi, que todo lo que pueda llegar a pedir era para mi familia y amigos, mi vida en ese momento era simplemente perfecta. Aunque haya sido por un mes, vivi el suenio de un sol y de un mar, y una vida peligrosa, y definitivamente cambie lo amargo por miel, gracias Charly, pero mejor obviemos el resto de la letra.
No comments:
Post a Comment